Uno de los momentos más anhelados por los españoles tras estos meses de confinamiento fue volver a disfrutar de una cerveza en una terraza y en buena compañía. Y no es de extrañar, porque, según un estudio realizado a 8.500 personas, de edades comprendidas entre los 18 y los 65 años, y elaborado por 40dB. para Cerveceros de España, la cerveza no entiende ni de clases sociales, ni política, ni de sexos. De hecho, uno de cada ocho adultos en España reconoce consumirla, casi la mitad de manera habitual.
España puede definirse como un país cervecero, en el que la cerveza es un producto igualitario en cuanto a penetración de consumo en todas las zonas del país, tanto por comunidades autónomas como por tamaño de población, así como a nivel socioeconómico, reforzando de esta manera su posición como una bebida transversal y social. Sin embargo, el sector cervecero ha sido uno de los más golpeados por la pandemia de la COVID-19. La lenta recuperación del sector hostelero, estrechamente ligado al hostelero ya que casi el 70% del consumo de cerveza fuera se da fuera del hogar, en la que el 20% de establecimientos siguen cerrados, así como la caída del turismo internacional, han tenido un profundo impacto en el sector.
“La cerveza es parte de la cultura de los españoles y es una de las bebidas con mayor alcance en la población adulta, que se consume de forma moderada y responsable. Se trata de un producto popular, muy nuestro, y cuyo binomio con la tapa es difícil de romper”, ha explicado Jacobo Olalla Marañón, director general de Cerveceros de España.
Radiografía del consumidor de cerveza
Sociables, extrovertidos, concienciados con el medioambiente y con una vida social activa, así es la radiografía del consumidor de cerveza, según el estudio elaborado por 40dB. De hecho, casi el 80% de las personas que beben cerveza se consideran extrovertidas y sociables.
La cerveza es un producto social y, como tal, los cerveceros reconocen que algunos de sus momentos más especiales los han vivido en compañía y con una cerveza en la mano. Esto explica que la familia (71,5%), el tiempo libre (51%) y los amigos (48%) sean los pilares de su vida. Asimismo, la salud también es una parte importante para ellos, los cerveceros también cuidan de su salud y son coquetos, les gusta cuidar su aspecto. Un 36% reconoce practicar algún deporte con regularidad y un 47% camina todos los días, de forma similar a la población general.
Por otro lado, los consumidores de cerveza también están preocupados por el medioambiente y la sostenibilidad. Cerca del 60% considera que el cambio climático es uno de los principales problemas de nuestros tiempos, reciclan (75%), están a favor de las energías renovables (79%) y practican el ahorro energético (70%). Por eso, al igual que para la población general, el cervecero es un consumidor que tiene en cuenta las buenas o malas prácticas de las empresas a la hora de tomar decisiones. De hecho, el 65% considera imprescindible que las grandes empresas tengan políticas de RSC.
“Estos datos demuestran que la cerveza está muy ligada a la propia sociedad y a su actividad y también tiene que ver con nuestro propio carácter”, añade Jacobo Olalla Marañón. “La cerveza es una bebida capaz de penetrar en todos los ámbitos de nuestra sociedad y eso la hace partícipe de la felicidad de las personas”.
España puede definirse como un país cervecero, en el que la cerveza es un producto igualitario en cuanto a penetración de consumo en todas las zonas del país, tanto por comunidades autónomas como por tamaño de población, así como a nivel socioeconómico, reforzando de esta manera su posición como una bebida transversal y social. Sin embargo, el sector cervecero ha sido uno de los más golpeados por la pandemia de la COVID-19. La lenta recuperación del sector hostelero, estrechamente ligado al hostelero ya que casi el 70% del consumo de cerveza fuera se da fuera del hogar, en la que el 20% de establecimientos siguen cerrados, así como la caída del turismo internacional, han tenido un profundo impacto en el sector.
“La cerveza es parte de la cultura de los españoles y es una de las bebidas con mayor alcance en la población adulta, que se consume de forma moderada y responsable. Se trata de un producto popular, muy nuestro, y cuyo binomio con la tapa es difícil de romper”, ha explicado Jacobo Olalla Marañón, director general de Cerveceros de España.
Radiografía del consumidor de cerveza
Sociables, extrovertidos, concienciados con el medioambiente y con una vida social activa, así es la radiografía del consumidor de cerveza, según el estudio elaborado por 40dB. De hecho, casi el 80% de las personas que beben cerveza se consideran extrovertidas y sociables.
La cerveza es un producto social y, como tal, los cerveceros reconocen que algunos de sus momentos más especiales los han vivido en compañía y con una cerveza en la mano. Esto explica que la familia (71,5%), el tiempo libre (51%) y los amigos (48%) sean los pilares de su vida. Asimismo, la salud también es una parte importante para ellos, los cerveceros también cuidan de su salud y son coquetos, les gusta cuidar su aspecto. Un 36% reconoce practicar algún deporte con regularidad y un 47% camina todos los días, de forma similar a la población general.
Por otro lado, los consumidores de cerveza también están preocupados por el medioambiente y la sostenibilidad. Cerca del 60% considera que el cambio climático es uno de los principales problemas de nuestros tiempos, reciclan (75%), están a favor de las energías renovables (79%) y practican el ahorro energético (70%). Por eso, al igual que para la población general, el cervecero es un consumidor que tiene en cuenta las buenas o malas prácticas de las empresas a la hora de tomar decisiones. De hecho, el 65% considera imprescindible que las grandes empresas tengan políticas de RSC.
“Estos datos demuestran que la cerveza está muy ligada a la propia sociedad y a su actividad y también tiene que ver con nuestro propio carácter”, añade Jacobo Olalla Marañón. “La cerveza es una bebida capaz de penetrar en todos los ámbitos de nuestra sociedad y eso la hace partícipe de la felicidad de las personas”.